jueves, 4 de septiembre de 2014

4 de septiembre

Para mi, cuando imagino a una persona que quiero en mi vida -y no me refiero solo en el sentido romántico-, no me imagino su rostro o su carrera, me imagino como me siento cuando estoy con él/ella.
Alguien inconformista, ambicioso, o que lo sea almenos tanto como yo. Que me estremezca, y que sepa como hacerlo. Alguien que entienda que yo solo escriba dos puntos suspensivos, y no tres, sin explicación alguna. Que a pesar de no contar con un manual de vida, quiera improvisar con todas sus fuerzas como vivir.
Alguien que entienda que no me guste estar sola, pero que disfruto de un tiempo en que yo misma soy mi única compañía. Alguien que no necesite decir las cosas por instagram ni facebook, sino que sepa demostrarlos. Que entienda que me guste el mar -y también la montaña-, y que en ocasiones puedo ser muy indecisa. Que no soporto que se crean que soy una chica que solo ve pelis ñoñas. Que sepa lo que es sentir y que diga aquello que sienta.
Alguien que pueda ofrecerme la fuerza que me falta en algunos momentos. Que conozca a Nuria y también a N. Que entienda que puedo cometer errores, que puedo ver algo con mis propios ojos.. y sin embargo no creérmelo, que en ocasiones me rompo y en otras soy fuerte.
Alguien que consiga que perderme en sus ojos sea mi única forma de encontrarme (y ésto sí, va en el sentido más romántico que soy capaz de escribir).


9 comentarios:

  1. Hola cielo! Bonito post, ami me pasa lo mismo. Yo no pienso en como sera, ni donde vivira ni nada de eso, sino en como sere yo cuando este con él. Que me acepte cuando hoy quiero esto y mañana lo contrario.un besito♡

    ResponderEliminar
  2. Es que sólo la gente que conoce nuestras dos caras es la que nos conoce de verdad. Eso no lo mostramos a todo el mundo pero quien lo conoce es la gente que mantenemos a nuestro lado porque merecen la pena.
    un besoo!

    ResponderEliminar
  3. Simple sencillo y precioso. Yo tampoco es que me haya pasado mucho por tu blog, pero esta entrada me demuestra que jamas podre dejarlo de lado. Escribes precioso, y escritos que te hagan cuestionarte lo que antes pensabas, escritos con los que te puedes sentir identificada y escritos que hacen q se te erice la piel como este son los que merecen la pena.

    Escribes increíble N!

    ResponderEliminar
  4. Tambien queria decir que cuando yo pienso en esa persona, lo unico que soy capaz de imaginar es como me sentiria entre sus brazos, un abrazo puede demostrar amor, ternura, amistad, y te puede hacer sentir increíblemente bien incluso en tus peores momentos. Un abrazo de esos que duran segundos largos.

    ResponderEliminar
  5. A veces solo sabemos ser N o ser Nuria, entonces hace que sea más dificil que la otra persona entienda los dos puntos supensivos.
    Cuando encuentres a alguien así, dale mi número de teléfono. jajaja
    Un beso bombón.

    ResponderEliminar
  6. Me encanta, N. Encontrar a alguien que quiera descubrir todos tus yoes es una sensación única.

    Te mando un abrazo desde El ruido que deja el silencio.

    ResponderEliminar
  7. Es cierto que no tengo por costumbre ojear tu blog, aunque más cierto es que cada vez que leo una entrada no puedo parar y sigo, y que me sigue sorprendiendo la grandeza con la que eres capaz de transmitir a través de las palabras.
    Imagino que estoy equivocada, pero me haces verme a mi: tan buena escribiendo, pero tan torpe hablando (a la hora de expresar nuestros sentimientos, digo).
    No te sorprendo demasiado, no te hablo, no te escribo. He leído una entrada sobre esa búsqueda en el pasado del porqué pasaron las cosas e, inevitablemente, he pensado en nosotras. Aunque no sé si para ti hay un "nosotras". Para mi lo sigue habiendo y pensarás "qué hipócrita" y te diré "tú así lo crees, yo así no lo siento, sino me ahorraría el comentario, la lectura, las llamadas (finjamos que han sido más de una), etc." Y para mi lo sigue habiendo por el simple hecho de que nunca me ha hecho falta mantener el contacto con una persona o preguntarle qué tal el día para entender, para sentir, que si nos necesitamos estamos ahí. Aunque también pienso que en ese sentido, me equivoqué y debí ser más constante, menos descuidada tal vez, porque no todo el mundo es como yo.
    Bueno, yo aquí enrollándome y lo que te quería decir es que yo conozco a Nuria y, a la vez, a N, aunque no sea todo lo profundamente que debería, pero que igual las dos podéis encontrar en mi un apoyo, una mano a la que agarrarse y, como no, la dosis necesaria para ver el lado positivo-realista de las cosas.

    ResponderEliminar