sábado, 19 de marzo de 2011

Calada de recuerdos

Me enciendo un cigarro, mira que ironia, si me vieses fumando me echarias la bronca y me torturarias haciéndome cosquillas hasta que te prometiese no volver a tocar un cigarro en mi vida, pero no estás aquí, junto a mi.
Y miro a lo lejos, y recuerdo todos esos dias en los que tu estabas sentado aquí, cuando desde esta azotea mirábamos las estrellas, brillantes y cercanas, como si puediésemos tocarlas, y veíamos la ciudad, con sus luces, perdiéndose a lo lejos en la noche infinita.
Y me viene a la mente esa mágica noche, en la que subimos los dos a hurtadillas por las escaleras, intentando ir en silencio, aunque no podíamos parar de reir, esa noche, la primera que subimos aquí, a nuestro "lugar feliz", dónde solo existiamos tu y yo, y el resto del mundo no importaba, y todavia puedo verte, extendiendo la manta en el suelo y tapándome con tu chaqueta, todavia puedo oler tu perfume en ella, podria girarme ahora mismo y verte aquí a mi lado, sonriendome y mirándome con esos ojos verdes tuyos.
Pero no, ahora me giro y a mi lado no hay nadie.. y vuelvo a cerrar los ojos, intentando seguir reviviendo esa noche, y al hacerlo una lágrima se derrama por mi mejilla, pero no puedo llorar, no cuando estoy recordandote. Le doy otra calada al cigarro y cierro los ojos.
Ahora si, te veo otra vez tumbado a mi lado, sonriendo, y siento el calor de tus manos temblorosas retirándome el pelo de la cara, acercándonos poco a poco. No podría decir cuanto estuvimos así, en silencio, ni cuanto tiempo estuvimos ahi, tan cerca, rozándonos los labios, sin que ninguno de los dos se atreviera a cruzar esos milimetros para fundirnos en nuestro primer beso y no podría decir quien cruzó ese abismo, quizá los dos.
Ese beso: fue dulce, fue tierno, fue perfecto, fue.. todo.

Esa noche hablamos durante horas, de todo y de nada a la vez, abrazados, mirando las estrellas, diciéndonos con un suspiro las palabras más dulces que nunca pronunciaré de nuevo, susurrándonos un "te quiero".
Y abro los ojos, y suspiro de nuevo, miro el cigarro en mi mano y lo lanzo al abismo, tenías razón, no debo fumar; y sin querer, mi mano roza nuestro dibujo, y me adentro otra vez en los recuerdos, en esa noche que escribistes eso, que, aunque que me parecia una cursilada en el fondo me encantaba. Y sonrio para mis adentros, con una mezcla de alegria y melancolia, mirando las palabras más destacadas, el "para siempre", y me entran ganas de borrarlo, que gran mentira. Creo que cuando escribistes eso nunca pensastes que en unos meses estarias viviendo en el extrangero, que te habrian concedido esa beca de la que tanto hablabas y no creias que te diesen nunca. Y miro al cielo y veo las estrellas, lejanas, distantes, sin poder tocarlas con las manos ya; y miro a lo lejos y veo la ciudad, que ya no me parece tan mágica, al igual que la noche.
Y si, recuerdo esa noche, la primera de todas, hace 336 dias, esa en la que me di cuenta de que te amaba, y sonrio, mirando otra vez tu dibujo, ya gastado por el tiempo y la lluvia.
"Para siempre" susurro, bajando las escaleras que llevan a nuestra azotea.

"But, tonight, I just wanna be with you"

1 comentario:

  1. Me gusto mucho!!! Te voy a seguir me gusta tu tono. tu forma de escribir y me encanta como tienes el blog. Es decir tienes un seguidor mas. (L)(L)

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