jueves, 28 de junio de 2012

Somewhere over the rainbow

Cantos de cigarras.
Hay momentos en los que te sientes perdida, que todo te sobrepasa y que el mundo te viene grande. En esos momentos siempre recurro al mismo lugar. Y voy sola, sin nadie ni nada.
Busco mi espacio. Mi lugar. Donde realmente pertenezco.
Supongo que puedo tener alas, pero también raíces. No hay porque elegir. Son diferentes partes de una misma persona. Las dos caras de la moneda: no se ven, pero están unidas.
Tal vez no sea el mejor ejemplo, pero en realidad todos somos como monedas, unas veces estamos de pie y otras nos caemos, pero en esos momentos, siempre hay algo que te hace levantarte.


Cuando me pierdo busco encontrarme, y siempre estoy en el mismo lugar.

martes, 19 de junio de 2012

Mine


-¿Sabes como leí una vez que se debía enamorar a una dama?- Me dijo, de repente, al verme entrar en la cocina. Esperé- Cocinando con ella, no para ella- sonrió y me guiñó un ojo. Como me gustaba esa media sonrisa.
-¿Todo esto es una queja por tener que hacer la cena?- Inquirí. Ambos nos reímos.
-Es una invitación a la cocina
-¿Y si la dama ya está enamorada?- le pregunté, acercándome a él.
-Nos saltamos un par de pasos- susurró, a escasos centímetros de mis labios, abrazándome.

Me alejé de su abrazo, me dirigí a la puerta y me giré a tiempo para susurrarle: “Entonces no tendrás ninguna queja por cocinar tu, monada”, a la vez que le guiñaba un ojo.
-Eres única- me gritó.
Suspiró.
Ambos nos reímos.

viernes, 15 de junio de 2012

Hablan de maravillas sin haber conocido tu sonrisa

¿Sabes lo que me apetece? Rediseñar los caminos que marqué hace tiempo en tu espalda, una escapada de esas, de las de antes. Un beso a escondidas. Un susurro a media noche. Nuestras bromas absurdas finalizadas con un "pero te gusta. Lo sabes".
Recordar esos viejos tiempos, con las llamadas en plena madrugada y tu particular forma de lanzar dobles sentidos que solo entendíamos nosotros dos. Tu forma de reírte del mundo y hacerme reír a mi.
Volver a jugar a dibujar con arena sobre tu piel.
Volver a entender los secretos que escondes en tus ojos.

¿Sabes lo que realmente me apetece? Tú.
Y te gusta, lo sabes.

Y a mi también